
Cruzar diferentes zonas horarias puede generar grandes desequilibrios en nuestro organismo y sobre todo en el sueño, especialmente en el de los bebés. Es el conocido como jet lag.
¿Cómo afecta el jet lag al sueño?
Dado que, nuestro reloj biológico controla todas las células y hormonas de nuestro cuerpo, está configurado en una determinada zona horaria. Así que, cuando sale de esa área y vuela a otra, el cuerpo necesita unos días para recuperar el ritmo normal, pero… ¡tiene solución!
Consejos para el jet lag de bebés y niños
- En primer lugar, es importante prestar atención a las señales de hambre y sueño durante los tres o cuatro días siguientes a la llegada del destino. Generalmente es el tiempo que el cuerpo tarda en adaptarse, aunque siempre dependerá de la diferencia horaria.
- Los efectos del jet lag son inevitables. Aceptarlo y tener en cuenta que el reloj interno necesita adaptarse es la clave para no sufrir de más la falta de sueño. Es importante no obligarles a dormir y tampoco pasar horas intentando que concilien el sueño. Durante los primeros días del viaje, su cuerpo le estará enviando señales totalmente contrarias.
- También será determinante la planificación durante las horas de luz y de oscuridad. A lo largo del día es importante hacer actividades a la luz del sol, planificar las comidas y la socialización alrededor de la nueva zona horaria y dejar un par de horas de descanso a primera hora de la tarde.
- Antes de ir a dormir, también conviene hacer algunos ajustes, como atenuar las luces en torno a una hora antes de irse a la cama y disfrutar de un ambiente tranquilo y sin demasiados estímulos. Si el pequeño todavía duerme siestas, es crucial que no se las salte para evitar el exceso de cansancio. No alargar sus periodos de vigilia demasiado y respetar sus necesidades de sueño diurno ayudará a que su reloj interno se vaya ajustando. Los niños descansados generalmente se adaptan mucho mejor a este tipo de cambios.
- Y por último, no olvidar tratar de mantener la estabilidad en sus rutinas de sueño y en la manera en que duerme en casa. Esa seguridad le ayudará a adaptarse al nuevo entorno de sueño”.
Si necesitas ayuda para mejorar el sueño de tu peque o quieres que hagamos una valoración de vuestro caso, escríbenos. Juntos veremos cuál es la mejor manera de ayudarle a descansar mejor en el caso de que necesitéis nuestro acompañamiento.